Planas afea a la Eurocámara que plantee «nuevas exigencias» cada vez que se logran avances sobre la nueva PAC
Retrasa la Conferencia Sectorial con las comunidades autónomas hasta que se cierre un acuerdo en la UE
BRUSELAS, 28
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha afeado este viernes al Parlamento Europeo que durante las negociaciones de la Política Agrícola Común (PAC) esté planteando «nuevas exigencias» cada vez que se da «un paso adelante» y ha acusado a la Comisión Europea de tener una posición «asimétrica» durante las conversaciones, alineándose con los eurodiputados.
En una rueda de prensa después de que los Veintisiete y los eurodiputados constatasen la falta de acuerdo y la necesidad de darse unas semanas para intentar el pacto, Planas también ha garantizado que no dará su visto bueno a un acuerdo que no respete la «triple» sostenibilidad ecológica, económica y social.
«Ese equilibrio es absolutamente definitivo. Solo daré mi acuerdo a un acuerdo europeo que permita una triple sostenibilidad», ha enfatizado el ministro español, quien después ha asegurado que «no es dramático» que no se haya podido sellar la reforma esta semana y que es «optimista» de cara a las próximas semanas.
En todo caso, el titular de Agricultora del Gobierno español ha señalado, tras la falta de acuerdo a nivel europeo, es «prudente» retrasar «unas semanas» la Conferencia Sectorial inicialmente prevista para el próximo 11 de junio para establecer el modelo de aplicación de la nueva PAC en España.
Planas ha explicado que ha sido una negociación «dura» y «complicada» que ha servido para conseguir «avances» en algunos de los temas que seguían abiertos, pero que también ha tenido la «sensación» de que la «voluntad de compromiso» para cerrar un pacto «en algunos momentos no se encontraba sobre la mesa»
NUEVAS DEMANDAS DE LA EUROCÁMARA
«Debo decir, y estoy preocupado por ello, que en las sucesivas rondas de negociación con el Parlamento Europeo en lugar de cerrar temas han ido reapareciendo otros», ha asegurado el ministro, para después añadir que en algunas ocasiones se han planteado «condiciones particulares de aplicación alejadas en algunos casos de la realidad productiva».
En esta línea, Planas ha asegurado que la «sensación colectiva» entre los Estados miembros ha sido que «cada vez que se daba un paso adelante, se planteaban nuevas exigencias» por parte de los eurodiputados, lo que ha sido un factor fundamental para que las conversaciones no llegasen a buen puerto.
El otro elemento que ha provocado la situación de bloqueo está relacionada con «flexibilidad» que las capitales quieren introducir a cambio de aceptar que la partida reservada para los nuevos ecoesquemas ascienda al 25%.
En este punto, el responsable de Agricultura de España ha negado que esta flexibilidad otorgue a los gobiernos un margen de maniobra excesivo, como piensa el Parlamento Europeo. «No es así», ha dicho, para después argumentar que «se han marcado límites y posibilidades» en este asunto.
EL PAPEL DE LA COMISIÓN
Otro aspecto de las negociaciones que Planas ha destacado durante la comparecencia de prensa es el papel que ha jugado la Comisión Europea. En su opinión, el comisario de Agricultura, Janusz Wojciechowski, «no ha jugado plenamente el papel que debería jugar» para «construir puentes» y «facilitar el acuerdo».
«Sinceramente he tenido la impresión de cierta asimetría en esta negociación», ha explicado. El ministro ha recordado que los Tratados conceden al Ejecutivo comunitario el papel de impulsar las políticas y también de servir de «puente».
«En muchos momentos nos ha dado la impresión, generalizada de la práctica totalidad sino todos los ministros, que ese papel no se ha cumplido plenamente», ha añadido el responsable español de Agricultura.
Planas ha puntualizado, en todo caso, que este comentario no es un «reproche insalvable» pero sí «una llamada de atención» porque «el mundo y las instituciones funcionan mejor cuando cada uno cumple el papel que está llamado a desempeñar».