El Gobierno evita criticar a Marruecos y habla de crisis migratoria que atribuye a diversas circunstancias
Tanto Marlaska como Montero descartan que la acogida del líder del Polisario sea el motivo principal
El Gobierno ha evitado este martes criticar a Marruecos por la llegada masiva de migrantes a Ceuta en el último día, asegurando que la «crisis migratoria» que se está produciendo obedece a diversas circunstancias que se están analizando y que hay contactos con el país vecino.
Ni la portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ni el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha entrado a valorar si los últimos acontecimientos serían la materialización de las «consecuencias» de las que advirtió Rabat por la acogida por motivos humanitarios del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali.
«Estamos analizando las circunstancias de los hechos que acontecieron ayer y que todavía se están produciendo», ha comentado Marlaska, apostando por no sacar conclusiones apresuradas
«Son circunstancias muy complejas», ha sostenido, mencionando las de tipo socioeconómico, la propia pandemia así las situaciones humanitarias en terceros países. Dado que «son plurales», ha defendido que hay que analizarlas y evaluarlas, que es lo que se está haciendo, y «no llegar de forma un poco rápida a conclusiones que puedan obedecer en muy poco a la realidad».
Por otra parte, la portavoz del Gobierno ha asegurado que tanto el presidente, Pedro Sánchez, como la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, están manteniendo una «ronda de contactos y llamadas», incluida la UE ya que se trata de frontera exterior del bloque, si bien no ha ofrecido más detalles al respecto.
En este sentido, Marlaska ha puntualizado que también hay contactos con Marruecos. «Claro que estamos hablando, es una cooperación y una coordinación diaria», ha defendido, insistiendo en que así ha sido en los tres últimos años. «Si no hubiera ese contacto, sería bastante difícil o no se podría entender que se hubieran materializado 2.700 devoluciones» de los más de 6.000 migrantes llegados.
En lo que se refiere a la presencia de Ghali en España, Marlaska ha evitado pronunciarse sobre si estaba en contra de su llegada, como se ha apuntado en algunos medios, mientras que Montero ha insistido en las razones humanitarias que llevaron a tomar la decisión. «España evidentemente atiende a personas que tienen problemas humanitarios», ha señalado, sin ofrecer más detalles sobre la situación de este amparándose en la ley de protección de datos.