El director de Regenera Clínicas apuesta por abordar de forma «global» al paciente con fibromialgia
El cofundador de Regenera y director de Regenera Clínicas, Xavier Cañellas, ha señalado la necesidad de abordar a los pacientes de fibromialgia de forma «global», con motivo del Día Mundial de la Fibromialgia, que se celebra el 12 de mayo. Cañellas ha recalcado que «todos los sistemas corporales juegan en el mismo equipo y si falla uno repercutirá en el otro», por lo que desde un punto de vista global, el abordaje del paciente desde diferentes áreas estará encajado en la comprensión del sistema de la persona y no en una parte suya aislada.
Además, el cofundador de Regenera ha destacado que son «cada vez más» las personas que acuden en primera opción a la medicina integrativa. Según Cañellas, se está viviendo «un cambio de paradigma» y los pacientes «buscan entender qué es lo que realmente les está pasando, ya no se conforman con medicarse para tapar un síntoma, necesitan encajar el qué y el por qué». A su juicio, resulta «fascinante» el cambio que pueden realizar cuando comprenden por qué sufren, cuáles son las causas de su cuadro clínico».
Las personas con síntomas de fibromialgia que acuden a las clínicas de Regenera suelen ser mujeres de entre 35 y 60 años, que sufren dolor generalizado en todo el cuerpo, cansancio, alteraciones del sueño, trastornos digestivos, migrañas y mareos. Además, presentan un decaimiento importante del estado de ánimo, tristeza y ansiedad.
En este sentido, Cañellas ha explicado que desde la psiconeuroinmunología se crea un proceso diagnóstico que permite en una primera visita poner orden al relato del paciente, se traduce su biografía a la alteración de su biología y se ofrecen herramientas para que el propio paciente se convierta en activo en su proceso de curación, se tratan las causas y no sólo los síntomas.
«En el momento en el que se logra comprender el porqué le está ocurriendo esto al paciente, haciendo un relato y pasando por la cronología de los inicios de los síntomas, adquiere sentido realizar los cambios necesarios en la vida de estas personas. Es entonces cuando el paciente es capaz de tomar decisiones en su vida a todos los niveles», ha destacado.
Cañellas ha asegurado recibir en su consulta a muchas personas que se han sentido «rechazadas e incomprendidas» cuando le diagnostican la enfermedad, ya que habitualmente los acaban derivando a la clínica del dolor y a psiquiatría, con el agravante de tomar multitud de fármacos, que más que ayudarles, les empeora su salud».
También ha querido referirse a cómo el hecho de poner etiquetas sentenciadoras a las enfermedades dificulta el proceso de curación de los pacientes. En su opinión, la sentencia genera un creencia neurológica en la persona de que no va a curarse y no es el caso de la fibromialgia.
«Una de las dificultades más importantes a la hora de tratar a una persona diagnosticada de fibromialgia es transformar el diagnóstico a un cuadro más funcional para que se dé el permiso a cambiar su vida. Si uno cree que no se puede curar tiende a instaurarse en ese estado. El primer paso es tomar la decisión de cambiar la rigidez de un diagnóstico rígido a un diagnóstico funcional», ha concluido.