Monasterio defiende el «verdadero feminismo» que no impone ideas ni «arrebata la libertad» a las mujeres
«A estos de la izquierda radical que están acostumbrados a montar numeritos se les va a acabar el chollo», ha afirmado
ALCALÁ DE HENARES, 25
La candidata de Vox a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, Rocío Monasterio, ha defendido este domingo el «verdadero feminismo» que no permite que se impongan las ideas y ni que se «arrebate la libertad» a las mujeres.
Junto al presidente de Vox, Santiago Abascal, Monasterio ha participado en un mitin en el municipio de Alcalá de Henares, donde ha centrado su intervención en el feminismo. En concreto, ha ensalzado la figura de Concepción Arenal y ha criticado a la ministra de Igualdad, Irene Montero, y a la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, por «pretender ahora ser las representantes y asumir lo que hicieran otras».
«Nos da igual la lluvia, las piedras, los adoquines y nos dan igual los machos alfas, que estamos hartos ya», ha afirmado Monasterio, que ha insistido en que el 4 de mayo los madrileños se enfrentan a las elecciones «cruciales» y en las que algunos vienen a imponer «dictadura y censura».
«Nos estamos jugando la prosperidad, el derecho a discrepar, la dignidad del hombre y de la mujer», ha expresado, a la vez que ha recalcado que la izquierda «radical» ha engañado a «todos los suyos» mientras está «en su chalet, muy calentito, protegido por la Guardia Civil».
Monasterio ha criticado que los partidos de izquierda «no se atreven a hablar» de temas como los menores extranjeros no acompañados, de la okupación, ni de lo que hacen con los recursos de los españoles. «No se va todo a la sanidad, la educación o la emergencia social, se va a pagar chiringuitos, entes, fundaciones, consejeros, coches oficiales», ha dicho.
También, ha vuelto a cargar contra el candidato de Unidas Podemos a las elecciones, Pablo Iglesias, y sobre su enfrentamiento en el debate de la cadena Ser, ya que ha relatado que «no le sostiene ni la mirada» y «sale lloriqueando cuando alguien les dice verdades». «A estos de la izquierda radical que están acostumbrados a montar numeritos y a que todos se los traguen se les va a acabar el chollo», ha continuado.
Sus críticas también se han dirigido al resto de candidatos y ha indicado que Ángel Gabilondo (PSOE) estaba «sentadito en el debate que no sabía que hacer»; mientras que de Mónica García (Más Madrid) ha asegurado que es «Podemos pasada por la peluquería» y está «también sometida»; y ha criticado a Edmundo Bal (Cs) por defender ser «el centro centrado». «¿Qué es este espectáculo? El único partido que no se somete y que dice la verdad es Vox», ha subrayado.
«FEMINISTAS DE PACOTILLA»
Asimismo, Monasterio ha criticado a las feministas «de salón y de pacotilla» y les ha pedido que defiendan «su dignidad», a lo que ha añadido que están «calentitas soltando doctrina» y «no saben lo que es currar de verdad».
En concreto, ha aludido a su trayectoria profesional y se ha preguntado si ellas se atreverían a «mirar a algunos musulmanes que no soportaban que la jefa de obra fuera una mujer y les mirara a los ojos y les diera órdenes».
La candidata de Vox defiende que las mujeres pueden llegar donde quieran «por mérito y esfuerzo». También, ha cargado contra el inmigrante que llega a España a «acabar con nuestras costumbres y la igualdad de la mujer». «A ese no lo queremos», ha apuntado.
Considera que quien llegue a España tiene que comprometerse con los valores del país y que «ha costado mucho» construir la nación para que «vengan otros a destrozarla».
De la misma manera, ha censurado el «adoctrinamiento» político en las escuelas «con el voto a favor del PP» y ha vuelto a criticar la Ley de protección de la infancia aprobada en el Congreso de los Diputados.
Monasterio ha hecho alusión al último caso de un depredador sexual en Madrid que ha sido detenido por la Policía Nacional y ha señalado que «nadie había preguntando de dónde venía y nadie le había pedido un papel».
La líder de Vox en Madrid ha destacado que derogarán las leyes de género y ha insistido en que esta Ley es «una vergüenza». Por último, ha subrayado que solamente con respeto conseguirán construir «una España mejor» bajo «una única bandera».