MSF y las autoridades sanitarias colaboran para dar respuesta a la «brutal nueva ola» en Lima
Las autoridades sanitarias peruanas y Médicos Sin Fronteras ha iniciado una colaboración para enfrentar la «brutal nueva ola de COVID-19» que atraviesa el país, con altas tasas de mortalidad y hospitales colapsados, en el sector norte de la capital, Lima.
Así lo ha confirmado la organización a través de un comunicado, que ha señalado que el país afronta «una escasez crítica de suministros de oxígeno, mientras las tasas de infección aumentan por la presencia de la variante» brasileña.
Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) recogidos por Médicos Sin Fronteras, durante la primera semana de abril se registró una media de casi 10.000 nuevos casos y 300 muertes al día, siendo el número de muertes un 50 por ciento mayor que a la semana anterior.
En este contexto, y después de una evaluación llevada a cabo por Médicos Sin Fronteras, la ONG ha desplegado una intervención de emergencia en colaboración con las autoridades sanitarias de la provincia de Huaura, al norte de Lima, donde el hospital regional ubicado en la capital provincial, Huacho, sufre una grave escasez de personal ante el aumento del número de casos de COVID-19.
Por otra parte, la Defensoría de Perú ha exigido este martes al Gobierno nacional que en medio de este pico de la crisis sanitaria y «ante el preocupante aumento de casos de personas infectadas con la COVID-19» el Ministerio de Salud entregue de manera gratuita mascarillas «en aquellas zonas con mayores índices de contagio y niveles de pobreza extrema».
Además, ha pedido a la cartera de Salud que establezca especificaciones técnicas para la confección de mascarillas hechas de tela, ya que son las que más se usan entre los ciudadanos.
En el último informe de las autoridades sanitarias de este martes, se han notificado 3.260 nuevos contagios de coronavirus, así como 417 nuevos decesos frene a 315 pacientes que han recibido el alta hospitalaria en las últimas 24 horas.
Con esta actualización de cifras, el país se sitúa en los 1.719.088 casos de la COVID-19, de los que 1.645.100 son pacientes que han logrado sobreponerse a la enfermedad, mientras que otros 57.954 han perdido la vida y 15.547 siguen hospitalizados.