El presidente de Somalia viaja a RDC donde está previsto que se reúna con su homólogo de Kenia, según medios
El presidente de Somalia, Mohamed Abdulahi Mohamed, conocido popularmente como Farmajo , ha viajado este lunes a República Democrática del Congo (RDC) donde según la información de medios locales se presume que se reúna con su homólogo de Kenia, Uhuru Kenyatta, con quien rompió relaciones hace unos meses.
Farmajo partió este domingo desde Mogadiscio para tratar de retomar las relaciones con Nairobi como parte de una iniciativa liderada por la Unión Africana, informa el medio somalí Somali Guardian . A su llegada a Kinsasa ha sido recibido por la ministra de Relaciones Exteriores de RDC, Marie Tumba Nzeza.
El presidente somalí enfrenta una creciente presión por parte de la comunidad internacional para revocar la extensión de su mandato aprobada por el Parlamento para volver a las conversaciones con los líderes estatales regionales.
No obstante, el encuentro con Kenyatta no está en la agenda oficial de Farmajo , que ha sido invitado oficialmente por el presidente de RDC y actual presidente de la Unión Africana, Félix Tshesekedi, según fuentes de la Presidencia somalí.
Es la primera visita al extranjero de Farmajo desde que expirara su mandato el 8 de febrero y el Parlamento aprobara su extensión, algo para lo que buscará apoyo durante esta visita.
Somalia rompió relaciones con Kenia el pasado 15 de diciembre de 2020 tras la visita oficial del presidente de Somalilandia, Muse Bihi Abdi, a Nairobi, donde se reunió con altos funcionarios del Gobierno keniano.
Somalia retiró a su personal diplomático de Nairobi y dio un plazo de una semana al Gobierno de Nairobi para que haga lo propio con sus representantes. Por su parte, Kenia anunció que abriría un consulado en la capital de Somalilandia para marzo y se establecerían vuelos directos entre Nairobi y Hargeisa.
Las precarias relaciones entre ambos países después de que Somalia ordenara la expulsión del embajador de Kenia en el país, al considerar que el Gobierno de Nairobi estaba interfiriendo en las elecciones presidenciales y parlamentarias celebradas en febrero.
