17A- Informes del CNI enviados al Congreso confirman desconfianza hacia el imán de Ripoll: «No tiene ninguna fiabilidad»
La documentación del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) desclasificada por el Consejo de Ministros del pasado 23 de diciembre sobre los atentados yihadistas del 17 de agosto de 2017 en Barcelona y remitida a la comisión del Congreso que investiga esos ataques incluyen varios informes del centro que constatan la desconfianza de los agentes que le trataron hacia el imán de Ripoll Abdelbaki Es Satty, al que no conceden «ninguna fiabilidad».
El CNI le entrevistó en tres ocasiones en 2014, mientras estaba en prisión en la cárcel del Castellón por tráfico de drogas, para sondear qué sabía exactamente de sobre los detenidos en la operación antiyihadista bautizada como Chacal , que había tenido lugar en Cataluña en 2006 y que acabaron siendo puestos en libertad.
También le entrevistaron para conocer qué información podía tener sobre el «ámbito radical o terrorista». Él quiso saber para qué se iba a usar la información que proporcionara y aceptó «facilitar» sus conocimientos sobre los asuntos que interesaban a los agentes, según consta en los documentos remitidos al Congreso, a los que ha tenido acceso Europa Press.
Es Satty identificó a algunos de los detenidos en fotografías que le mostraron y dio alguna información sobre los mismos, pero no aporto ninguna sobre los «presos radicales» y el seguimiento que hacían de la doctrina islámica, alegando que no conocía a ninguno «destacable» que la siguiera de manera «estricta».
«En todo momento la actitud de Es Satty es de desconfianza hacia sus interlocutores. Es preciso mantener una gran cautela. Es un individuo del que no se tiene ninguna fiabilidad y confianza», apostilla el CNI en el informe sobre la entrevista mantenida el 24 de abril de 2014, donde también destacan que «elude» profundizar sobre los asuntos que comenta. «Cuando se le pide que continúe suele quedarse callado», explican.
UN INDIVIDUO MUY OPACO Y DESCONFIADO
Previamente, tras el encuentro fechado el 31 de marzo, ya le habían definido como «un individuo bastante inteligente y desconfiado» que «intenta jugar con sus conocimientos». «Otro aspecto importante a valorar es que sería de interés realizar un vaciado total de sus conocimientos, cuestión que se planteó desde la primera entrevista, pero dado la personalidad del sujeto, trata de eludir», apuntan en el documento redactado tras su segundo encuentro con él.
Los agentes del CNI que hablaron con él le veían desde el primer momento como una «persona muy opaca» que apenas mostraba «interés por nada» y se mostraba «muy desconfiado».
Además, se ha desclasificado un análisis grafopsicológico del 2 de mayo de 2014, en el que el CNI concluye que Es Satty tiene «una inteligencia alta» y «muy buena memoria» y es una persona «propensa a la insinceridad, al exceso de táctica y a deliberaciones contaminadas por ideas superficiales». «Tendrá tendencia a decir lo que quieren oír los demás. Tiene las ideas claras, trabaja para él y va por libre debido a su alta independencia», advierten.