El Congreso debate las propuestas del PP para afrontar la crisis, centradas en bajar y suprimir impuestos

El PP llevará a votación la próxima semana al Pleno del Congreso su plan de choque para afrontar la crisis económica provocada por la pandemia de Covid-19, centrado en la rebaja de la presión fiscal, con una bajada del Impuesto sobre Sociedades a las empresas por debajo del 20% y la supresión de tres impuestos: el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones, el Impuesto sobre Patrimonio y el Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados de las hipotecas.

Asimismo, llama a aprobar exenciones fiscales a empresas afectadas por la pandemia, un aumento del período de carencia en los créditos del ICO, una nueva Ley Beckham de incentivos fiscales y una modalidad de contratación bonificada de personas desempleadas por la crisis.

Todo ello en la moción consecuencia de la interpelación dirigida a la vicepresidenta de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, en la última sesión de control al Gobierno, y que los populares completan con medidas en el mercado laboral, la formación y el facilidades para las empresas.

«AUTOPISTA ADMINISTRATIVA» PARA EMPRESAS Y PLAN DE RELOCALIZACIÓN

Para estas, proponen un plan de captación de empresas deslocalizadas y «grandes empleadores»; facilitar «una autopista administrativa para que una empresa pueda crearse en cinco días»; transformar el sistema de licencia previa por el de declaración responsable; la eliminación de «trabas fiscales, burocráticas y laborales» en una Ley de crecimiento empresarial; potenciar la Ley de segunda oportunidad y la armonización de normas en otra de unidad de mercado.

En el mercado de trabajo, abogan por mantener la reforma laboral de 2012, ampliar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) con vinculación a itinerarios formativos, especialmente en sectores más afectados, como el turismo y la hostelería, ampliar la tarifa plana para autónomos –«a ingresos cero, cuota cero»–, y una regulación del teletrabajo.

Para la Administración, el PP plantea su «racionalización, digitalización y eficiencia», una carrera funcionarial con incentivos y menos estructura, «empezando por el Gobierno», especifican.

POR CADA NUEVA LEY, DEROGAR DOS

En materia de formación, los populares defienden impulsar la FP dual en Educación Secundaria, la participación de la empresa en la Universidad, garantizar el bilingüismo, materias de emprendimiento, las llamadas STEM tecnológicas y científicas, orientar los currículos, titulaciones y plazas a la demanda laboral y realizar «evaluaciones públicas nacionales» a lo largo de toda la etapa educativa.

Finalmente, como recetas para mejorar la competitividad, plantean fomentar la reindustrialización y el abaratamiento de la energía, respaldar la internacionalización de las empresas, apostar por la economía circular, la sostenibilidad y el sector primario, potenciar la digitalización de empresas, el 5G y el fomento de startups y garantizar seguridad jurídica, a través de la despolitización de organismos reguladores y la simplificación de la regulación, «con el compromiso de derogar dos normas por cada norma que se apruebe».

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